"Tu visión devendrá más clara
solamente cuando mires
dentro de tu corazón.
Aquel que mira afuera, sueña.
Quien mira en su interior, despierta".
C.G.Jung
Bienvenid@ a la Casa Cinco.
La Casa Cinco es un espacio de autoconocimiento en el que abordamos el arte de ser y vivir a través de la escritura, ejercicios de creatividad, charlas, lecturas y de la astrología con enfoque psicológico.
Sí, sí. Ya sé que no te digo nada en concreto.
Una o dos veces al mes organizo una reunión vía Zoom a la que puedes asistir solicitándome el link. El tema y la fecha los sabrás si me sigues a través de mis redes sociales o si te apuntas en mi lista de suscriptores.
¿Qué hacemos en las reuniones?
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Comparto textos a manera de invitación a la reflexión y cuestionamiento o doy una breve charla.
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Propongo ejercicios de escritura terapéutica o de creatividad para que puedas contactar con tu mundo interior a través de estas herramientas.
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Revisamos temas universales, las funciones de la personalidad y la dinámica vincular a la luz de los arquetipos astrológicos.
Sí, sí. Ya sé que todo esto puede sonar muy abstracto. No es sencillo explicar una experiencia tan subjetiva. Pero si sientes un mínimo de curiosidad, probar no te cuesta nada. Te aseguro que la gente se sorprende gratamente una vez que entiende de qué se trata.
Si entre tus metas están:
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Sentirte una persona realizada.
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Tener relaciones sanas y enriquecedoras.
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Disfrutar del presente, aunque no siempre te sonría.
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Mantener la vocecita interna saboteadora a raya.
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Gestionar tu mundo emocional sin morir en el intento.
Y si te interesa el crecimiento personal, pero buscas una alternativa diferente a un curso o taller, en las reuniones de la Casa Cinco te encontrarás muy a gusto.
¿Para qué La Casa Cinco?
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Para mirarte y reconocerte desde una perspectiva diferente.
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Para conectar con tu yo creativo y espontáneo.
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Para aprender sobre ti y los otros de una manera original.
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Para que abraces todo aquello que te hace brillar. ¡Y brilles!
¿Por qué La Casa Cinco?
Un día me di cuenta de que para sentirme bien siendo grande
no podía dejar de ser niña. Y ese día una parte de mí se sintió muy feliz,
al fin reconocida. Otra se vio amenazada y gruñó: "a mí no me vengas
con inventos que tengo todo controlado". Y una tercera suspiró
pensando: "uff, tenemos trabajo".
Poner de acuerdo a mis voces internas siempre ha sido un reto titánico; la astrología, la escritura y la arteterapia me han ayudado en esa necesidad de hacer de mi cabeza un jardín en lugar de un laberinto o un campo de batalla.
¿Que si lo he logrado? Digamos que tengo un laberinto precioso, con flores y algunas señalizaciones. Ya no me asusta perderme en él, porque ahora procuro tomarme menos en serio y porque metí una escalera para poder tener otra perspectiva. Así, siempre encuentro el camino. Y de paso me encuentro.
La Casa Cinco nació con la idea de ser la más grande de las señalizaciones. Con ella me recuerdo para qué estoy en esta vida. Las palabras de Pablo d’Ors lo expresan con precisión: “El mundo no está, en primera instancia, para ser transformado, sino para ser disfrutado. Creo que nos engañamos cuando decimos que no tenemos miedo a disfrutar. Nuestro principal miedo es a disfrutar, es decir, a entrar en comunión con lo que hay. Y solo disfrutamos si somos creativos. Si estás atento, cada segundo es nuevo, y en la medida en que lo contemplas y participas de él estás creándote a ti mismo”.